Muchas personas en todo el mundo son fans de la decoración minimalista en sus casas y trabajos. Muebles de líneas rectas y sencillas, perfectamente colocados y decorados bajo la filosofía MENOS ES MÁS.
Uno de los aspectos que más destaca en este tipo de decoración es el orden y la limpieza. Y es que un reciente estudio avala que ver nuestra casa limpia y ordenada nos produce bienestar emocional.
En muchas ocasiones, la decisión de ordenar nuestras estanterías, armarios, cajones o vestidores no es algo planificado, sino más bien espontáneo, resultado de un arrebato de necesidad por organizar las cosas que visualmente nos sobrecargan cognitivamente.
Es importante que sepamos que mantener una filosofía de orden y limpieza tiene puntos muy positivos como:
- Aumenta la autoestima.
- Crea hábitos saludables.
- Aumenta la productividad.
La investigación que avala esta relación entre minimalismo y bienestar emocional se llevó a cabo entre el 2001 y el 2005, pero fue dada a conocer en el 2012, bajo el título de “Life at Home in the 21st Century: 32 Families Open Their Doors”.
En ella, analizaron la relación entre 32 familias y la gran cantidad de objetos que tenían en sus hogares. Los análisis exhaustivos fueron sorprendentes y arrojaron que:
- El desorden tiene fuertes efectos en el estado de ánimo.
- La autoestima se ve afectada si hay desorden en el hogar.
- Un gran porcentaje del estrés sufrido en una casa, es proporcional a la cantidad de cosas que tienen dentro.
Claves para conseguir un estilo minimalista en tu hogar:
El minimalismo cuenta con una serie de elementos imprescindibles. Su objetivo es aportar el máximo de practicidad en nuestro día a día y para eso, considera que no es necesario recargarlo. Todo aquello que sea prescindible, se va fuera. Es muy posible que además tengas que realizar un cambio de decoración que te ayude a ordenar y despejar tu entorno de trastos inservibles, que recargan tu percepción visual.
Algunas claves que pueden ayudarte son:
- Paredes despejadas: despejado no quiere decir vacío, usar algún cuadro o espejo puede dar sensación de amplitud y profundidad a tus estancias.
- Mobiliario con líneas rectas: El look minimal se caracteriza por muebles de diseño rectilíneo, acabados en mate y sin excesos. Evita los metales y sus brillos.
- Textiles lisos, sin estampados: Lo más importante es el color de base, normalmente neutro, aunque se pueden ver detalles en algún color que rompa y haga contraste.
- Pequeños detalles que importan: en un ambiente donde no hay demasiados muebles, siempre se agradece encontrar pequeños objetos que despiertan la inspiración.
- Piezas atemporales que consigan parar el tiempo y captar la atención de tus invitados. Un chéster es el claro ejemplo de pieza atemporal para dar estilo a nuestro salón.
Así que no pierdas la oportunidad de organizar una sesión de limpieza y aprovechar para ordenar tus zonas de la casa más habitables, para que el bienestar tuyo y de tu familia fluya de manera continua.
