Un año más siguen llevándose las paredes llenas de cuadros y láminas. La tendencia Wall Decor sigue pisando fuerte, y hoy día todo cabe en la decoración de paredes. Cuando se quiere renovar la apariencia de la casa de forma rápida y eficiente, podemos apoyarnos en las paredes. Las paredes tienen mucho peso en el diseño y la decoración de los ambientes.
Aunque son varias las tendencias Wall Decor este 2020: el revestimiento en piedra, el papel tapiz, los fotomurales, los vinilos decorativos… Hoy nos vamos a centrar en la decoración de paredes con cuadros y láminas, que aunque no son algo nuevo, este año su encanto radica en la manera de colgar las imágenes y en su enmarcado.
Las imágenes
Antes de comenzar a perforar paredes sin ton ni son, es necesario tomarse un tiempo para pensar y planificar, es importante elegir diseños que combinen bien no solamente entre ellos sino también con el resto de decoración y mobiliario con el que van a convivir. Debes tratar de seguir un hilo común, seleccionando cuidadosamente las láminas y/o cuadros que formarán parte de tu pared, con el fin de conseguir una coherencia visual y un resultado armónico.
Puedes optar por elegir láminas y obras de un mismo autor o una serie con los mismos motivos pictóricos. Otra opción es apostar por láminas o cuadros que compartan los mismos colores o gamas de tonos. Las fotografías en blanco y negro, quedan perfectas cuando se quiere apostar por una estética uniforme, jugando siempre con este dúo cromático en lugar de mezclar distintos tonos y colores. O por el contrario, alternar obras oscuras con otras claras, o fotografías en blanco y negro con otras en color.
Las instantáneas familiares aportan un plus de personalidad a cualquier rincón de tu casa.
La enmarcación
La enmarcación juega un papel decisivo a la hora de lograr armonía en la composición. Marcos de madera clara y paspartús en tonos crudos realzarán el colorido de cada obra. También se gana armonía cuando los cuadros tienen tonos parecidos. Los marcos en negro realzarán perfectamente la imagen y le aportarán elegancia.
En paredes con color, optar por marcos blancos es una buena opción. Pero para conseguir que los cuadros destaquen lo mejor es apostar por marcos en distintos acabados, no más de cuatro distintos. Y para un toque glam uno de estos acabados puede ser en dorado.
¿Dónde y cómo colocarlos?
Ahora bien, ¿dónde y cómo colgarlos? El salón, el recibidor, la escalera, tu dormitorio, incluso el cuarto de baño o la cocina son lugares donde poner tu toque de personalidad. Más allá de colocarlos sobre la pared, está también la posibilidad de colocarlos sobre una repisa especial para cuadros, dejarlos apoyados sobre un mueble. No es que de pereza hacer agujeros, es que es tendencia dejarlos así simplemente apoyados sobre una cómoda, una consola o un mueble especial.
En cuanto a la forma de colocarlos, un truco que nunca falla es partir del cuadro más grande y fijar las demás imágenes alrededor. Jugar con las líneas paralelas y procurar dejar siempre la misma distancia entre unas y otras.
El mix, todo un acierto
Y es que las paredes no tienen por qué ser aburridas. Si te atreves, configura composiciones en las que se mezclen varios tamaños, marcos, colores, texturas y motivos diferentes. El efecto WOW será instantáneo.
En cualquier caso, es hora de apostar por dar personalidad a tu espacio y una de las mejores alternativas para conseguirlo es a través de los cuadros y láminas de arte, especialistas en realzar y añadir emoción a cualquier hueco libre que tengas en tu hogar. Puedes encontrar gran variedad de láminas y cuadros en tiendas online como la de Artesta o Posterstore. También puedes optar por añadir algún mueble de diseño para dar un toque especial al rincón que elijas transformar.
